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Mi pareja se enfada porque no tengo ganas de sexo: ¿Qué hago?

Hablar de sexualidad dentro de una relación puede ser tan incómodo como tratar de abrir un frasco de mermelada atascado sin derramarla por todos lados. Ahora, si a eso le sumamos el conflicto de que uno de los dos no tiene ganas de sexo y la otra persona se enfada, el frasco se convierte en una bomba de relojería emocional.

Primero que nada, respira profundo. Si estás aquí, es porque estás buscando soluciones, y eso ya es un gran paso. Vamos a explorar este tema con cuidado, respeto y, por qué no, un poco de humor para aligerar el ambiente.

El deseo sexual en las relaciones es como la señal del Wi-Fi: a veces está a tope y todo fluye, y otras veces… bueno, parece que alguien apagó el router. Esto, queridos lectores, es completamente normal. La clave está en recordar que las relaciones tienen altibajos, y la diferencia en el deseo sexual no es el fin del mundo, sino una oportunidad para aprender y crecer juntos.

¿Por qué sucede? La respuesta no es tan sencilla como parece. El deseo sexual no se enciende o apaga como una lámpara. Está influido por un intrincado cóctel de factores, desde los físicos hasta los emocionales. 

El estrés del trabajo, las hormonas descontroladas, la falta de sueño, los problemas de salud, la calidad de la relación o incluso algo tan simple como no sentirse bien con uno mismo pueden afectar la libido. ¡Somos humanos, no robots! 

Ahora bien, ¿Qué pasa cuando estas diferencias generan enfados o malestar? Aquí es donde entra en juego la empatía y la comunicación. En lugar de asumir que tu pareja "ya no te desea" o que "algo está mal contigo", detente un momento y trata de entender qué puede estar afectando la situación. Puede que tu pareja esté pasando por un momento difícil que no tiene nada que ver contigo, o tal vez sea algo físico o emocional que necesita ser abordado.

¿Por qué mi pareja se enfada?

La frustración de tu pareja puede ser comprensible, aunque no siempre está justificada. En ocasiones, la falta de deseo puede interpretarse de manera errónea, y eso puede generar tensiones innecesarias. Aquí hay algunas razones por las que tu pareja podría estar sintiéndose molesta o confundida:

  • Inseguridad emocional: Tu falta de interés puede ser vista como un rechazo personal, lo que afecta su autoestima y le hace cuestionarse si sigue siendo atractivo/a para ti. ¡Spoiler! No es cuestión de atractivo, sino de múltiples factores que pueden estar en juego.
  • Expectativas desalineadas: Cada persona tiene una idea diferente sobre la frecuencia ideal de las relaciones sexuales. Mientras que uno puede estar esperando fuegos artificiales todas las noches, el otro quizás solo quiera un abrazo y una buena charla. 
  • Falta de comunicación: Cuando el tema no se discute abiertamente, las suposiciones toman el control. Tu pareja podría pensar que ya no le deseas, cuando en realidad estás agotado/a, estresado/a o simplemente no estás en el mejor momento emocional.

Recuerda, su enojo no significa que sea egoísta o insensible. Muchas veces, es solo su manera (quizás poco acertada) de expresar una necesidad emocional o física. La clave está en abordar el tema con empatía, sin culpas, y encontrar juntos un punto de equilibrio que funcione para ambos. ¡Menos suposiciones y más conversaciones sinceras!

Cómo hablar con tu pareja

La comunicación es la clave en cualquier relación, pero cuando se trata de sexo, la conversación puede sentirse como caminar sobre hielo delgado. Hablar abiertamente sobre tus sentimientos es fundamental para fortalecer la relación y encontrar soluciones juntos. Aquí tienes algunos consejos para abordar este tema de manera efectiva:

  • Elige el momento adecuado: evita abordar el tema cuando alguno de los dos esté molesto, estresado o con la cabeza en otra parte. Busca un momento tranquilo, en el que ambos estén relajados y puedan hablar sin interrupciones.
  • Expresa tus sentimientos con honestidad: en lugar de señalar con el dedo, habla desde tu experiencia personal. Frases como "Últimamente me siento algo desconectado/a y creo que eso está afectando mi deseo" son una excelente manera de abrir el diálogo sin generar conflictos.
  • Practica la escucha activa: dale espacio a tu pareja para compartir su perspectiva sin interrupciones. A veces, solo escuchar con empatía puede ser suficiente para disipar malentendidos y construir un terreno más sólido.
  • Aclara que no es un tema personal: es importante que tu pareja entienda que tu falta de deseo no es un reflejo de su atractivo o del amor que sientes por él/ella. Explícale que hay muchos factores en juego y que es algo que deseas resolver juntos.
  • Busquen soluciones en equipo: ya sea planear más tiempo de calidad, reducir el estrés diario o probar nuevas formas de conexión, encontrar opciones juntos hará que ambos se sientan parte del proceso.

Recuerda, el sexo es solo una parte de la relación, pero la conexión y el entendimiento mutuo son lo que realmente la mantienen fuerte.

Cuando el problema persiste

Si después de hablar y trabajar juntos sientes que el problema no mejora, es posible que necesiten la ayuda de un profesional. Un terapeuta sexual o de pareja puede proporcionarles herramientas y orientación para superar este obstáculo.

Recuerda que buscar ayuda no es un signo de fracaso, sino de compromiso con la relación. A veces, los problemas más difíciles requieren un poco de apoyo extra.

Es completamente normal que el deseo sexual fluctúe en una relación. Lo importante es cómo ustedes, como pareja, eligen manejar estas diferencias. En lugar de permitir que los enfados o los malentendidos creen una brecha entre ustedes, aprovechen esta oportunidad para comunicarse, entenderse y crecer juntos.

Porque, al final del día, el sexo no se trata solo de satisfacer una necesidad física. Es una forma de conexión, amor y complicidad. Y esos son los ingredientes que hacen que una relación no solo sobreviva, sino que florezca. 

Recuerda, en cualquier relación, lo más importante es el respeto, la empatía y el amor, tanto hacia tu pareja como hacia ti mismo/a. ¡Todo se puede resolver con comunicación y un poco de paciencia!

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Posted in: Sexualidad

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